Playamarina

Easily improved details from Management: 1) The pool area is somewhat chaotic in the afternoons. There are two lifeguards talking to each other and to another maintenance guy and they don't realize what's going on: people smoking, ball bathers, OVERCROWDED hot tub with people throwing little kids in the air and taking their drinks, trash cans full that it is impossible to leave something inside, hammocks occupied for hours and hours without their guests... Obviously with a touch of Management it is solved. 2) The rooms could be cleaner. They do not put towels for the number of guests per room, so you have to ask for them. Very Good: - Buffet - Entertainment staff especially morning shift. On the dates we stayed, the Hotel was quiet despite the fact that guests still do not know how to close the doors slowly, we continue to shout in corridors and rooms, not to mention how we behave in the dining room... But that is Another issue of education that unfortunately suffers are the employees of the Hotel.

Después de leer varias reseñas con algún que otro comentario negativo, optamos por probar, lamentado nuestra experiencia. Fuimos para pasar el finde en régimen de TI. Nuestra llegada al hotel fué el viernes casi a las 6 de la tarde, mientras hicimos check-in, nos alojamos, cuando bajamos al bar para merendar nos dicen que ya no hay nada que se cierra a las 7, no siendo ni las 7 de la tarde y con 2 niños pequeños que íbamos. Buffet penoso en todos los aspectos, ya fuese desayuno, almuerzo o cena. Para coger algo de carne o pescado, colas de 15 minutos, después preguntabas si iban a reponer ya que estaban casi todas las bandejas vacías y te respondían de malas maneras, diciendo que no sabían si repondrían o no, ya que no daban abastos. El personal para nada atentos, los que estaban tras la plancha bastante desagradables. La comida deja muchísimo que desear ya que había poca variedad y de baja calidad. Habitación amplia aunque si que necesita una reforma, las paredes estaban completamente llenas de manchas, limpieza lo justo, camas y cambios de toallas. Almohadas súper incómodas tuve que pedir varias. Nuestra gran decepción llega el día de la salida, después del desayuno, dejamos la habitación, nos bajamos a la piscina, ya que teníamos el almuerzo incluido por no haberlo podido hacer el viernes, fuimos al bar de la piscina a pedir dos botellas de agua, a lo que nos dicen que nuestro servicio termina a las 12 de la mañana, siendo las 11:45, que tenían que atender a todas las personas que estaban en la cola y que cuando llegase a nosotros si la tarjeta estaba ya bloqueada no podía servirnos nada. De ahí nos dirigirimos a recepción para hablar con alguna persona responsable, el cual nos atiende el gerente, dándonos la misma explicación que nuestro servicio acababa a las 12 de la mañana, todo por no servirnos 2 simples botellas de agua para los peques, ni aún habiendo hecho el viernes apenas uso de nada, ni del TI por la hora de nuestra llegada. Después de comentarle todo nuestro desagrado tengo que resaltar la atención del gerente, se dirigió personalmente a el bar para que nos atendieran, desde aquí te doy las gracias nuevamente Antonio. Habiendo visitado previamente algunos otros de la cadena, he de decir que me sorprendido negativamente. Lo mejor de todo, la animación, el mini club, los chicos son encantadores. La amplitud de la zona de la piscina, muchísimas hamacas libres, las piscinas y jardines limpios y muy cuidados. El SPA lo recomiendo, el personal muy atento y pendiente del bienestar del cliente. En conclusión, un hotel para clientes que no sean muy exigentes, no merece las 4 estrellas. Si cogéis alguna oferta igual si merece la pena, para mi que no fué nada económico, dejo muchísimo que desear.