Hotel Los Girasoles

Hotel propio del siglo pasado. Habitación en 2ª planta sin ascensor, ducha super estrecha, desayuno fuera del hotel y para colmo para abrir la puerta había que estar intentando un buen rato...

Contrate con desayuno sin gluten, resulta que el hotel no tiene cafetería, tienes que salir a un restaurante cerca. El restaurante te tuesta el pan el en mismo tostador que a todo el mundo con lo cual hay contaminación cruzada, y tienen las cosas de juntar en tarimas grandes donde meten todos los cuchillos todo el mundo y también está todo contaminado. Nos quejamos al hotel y me dicen que l cafetería a ellos le dijeron que si hacían sin gluten pero nunca lo confirmaron .. muy mal. Nos han dejado dos dias sin desayunar a todos Por otro lado no se pueden recibir llamadas a la habitación que no entiendo porque porque Oda eso hay un teléfono en la habitación

Las fotos hacen pensar que el hotel es mejor de lo que es. Los armarios son minúsculos y en el baño no cabes si tienes que bajar a un niño en la ducha. No repetiremos seguro. Desayuno fuera, en un bar distinto cada día, y el recepcionista no nos daba el ticket para desayunar el niño. Una vergüenza de hotel.

Para empezar las habitaciones no se corresponden con las fotografías que te muestran en las páginas donde se publicitan. No tienen ascensor por lo que no está adaptado para personas con movilidad reducida o carritos. Te ofrecen dejar el carro en la recepción por dónde entra y sale todo el mundo, un lugar poco seguro para dejarlo. Es excesivamente caro para las prestaciones que ofrece. Habitaciones pequeñas, baño aún más pequeño y con una ducha minúscula y además atascada. El baño estaba sucio, con restos de pelos de clientes anteriores, tanto en el suelo como en la pila, bañera y cisterna. La habitación también estaba sucia, al andar descalza se te ensuciaban todos los calcetines, y con mucha pelusas. La puerta del armario rota. Se escuchan todos los sonidos de la calle. Y el trato de algún empleado hasta algo desagradable. NADA RECOMENDABLE.

Hotel de dos estrellas, al cual se le ha caído una de ellas, las habitaciones son pequeñas, al igual que el baño, necesitarían una renovación de sus instalaciones. Las habitaciones no están insonorizadas por lo tanto se escucha a la gente de los pasillos y las conversaciones de las demás habitaciones. El hotel no dispone de ascensor, por lo tanto tienes que subir la maleta por las escaleras (tiene 2 plantas el edificio). Lo único bueno que tenía el hotel era su ubicación, está muy cercano al centro histórico y bien comunicado con autobuses y tranvía, la zona donde se encuentra es tranquila. El personal bastante agradable y atento con los huéspedes. Es una pena que las instalaciones estén tan anticuadas, creo que con un lavado de cara, se le puede sacar más partido al hotel y así justificar sus estrellas y su precio.

Recepción sin apenas luz, no tiene ascensor, no tiene cafetería, no tiene parking; ofrecen parking público por 15 euros/día. Habitación oscura, baño muy pequeño, cama y almohada muy incómodas, cortinas lúgubres. No aceptan todas las tarjetas de crédito, pago obligatorio por adelantando. Mala información de recepción a nuestra llegada. El recepcionista, del día de salida por la mañana, nos ofreció un trato trato muy desagradable. Ni lo recomiendo, ni volveré