Hotel Alta Montana

Mit Liebe fürs Detail angelegte Unterkunft. Traumhafter Blick bis ans Meer. Ruhig. Ideale Ausgangslage für Ausflüge in der Teide Region. Leider absolut unfreundlicher Gastgeber, der anstatt zu grüssen dem Gast das Gefühl gibt zu stören. Im hoteleigenen Restaurant kein Platz für die eigenen Gäste, obwohl aufgrund Feiertage kein anderes Lokal im Ort geöffnet hat. Frühstück bestehend aus Toast und Dosenfrüchten. Der Service ist dieser Unterkunft leider nicht würdig.

Lleva abierto desde el 1 de abril de este año por lo que las fotos ya no se corresponden. LA PISCINA YA NO EXISTE (la han convertido en una especie de rincón chillout), Y TAMPOCO DAN COMIDAS NI CENAS. Al llevar poco tiempo abierto faltan por pulir bastantes detalles, por ejemplo la falta absoluta de cajones o armarios en la habitación, lo que nos obligó a tener las maletas en el suelo, ropa limpia sin poder colgar o guardar, ropa de uso apilada en las dos sillas que hay.... igualmente en el baño no hay ni bidet ni un taburete o algún estante para poner si quiera el neceser o las cosas de aseo. El desayuno muy pobre, no tiene para tostar pan ni variedad en embutidos o cereales, sólo queso en lonchas, chorizo y salchichón, huevos revueltos y salchichas (todo frío, por cierto), inconcebible que estando en Vilaflor no ofrezcan nada dulce, y tampoco frutos secos. El horario del desayuno de 7 a 9h no permite retras**** un poco en la cama. NO OFRECEN AÚN COMIDA NI CENA. Por último lo más molesto de todo: tienen un perro en la entrada del hotel que ladra a todas horas en cuanto nota movimiento de personas o vehículos, tiene una caseta a la entrada pero lo dejan casi todo el tiempo en un patio junto a la habitación nº7, que por desgracia era la nuestra... aunque cuando está en la caseta también se escucha ladrar por lo que es imposible relaj**** o incluso dormir, a lo que tampoco ayudan las almohadas muy bajas y sin opción de otras (al no haber armarios, no hay mas almohadas o una manta extra en caso de necesidad). Mencionar también que en todo el fin de semana estuvo siempre el mismo chico para atender tanto recepción como desayuno... y no habla español por lo que si no sabes inglés lo tienes muy complicado para todo. En cuanto a las habitaciones: eviten la nº 7!! está escondida en la trasera del hotel por lo que no tiene vistas y lo peor, el perro ladrando a todas horas. El resto de habitaciones tienen buenas vistas pero igualmente se ve toda la habitación desde fuera pues están al paso y son cristaleras, tendrás que decidir si tener vistas o que te vean... también el sol al amanecer da de lleno y no hay cortinas opacas por lo que tendrás la habitación con total claridad desde que amanezca...

Skønt hotel i flotte omgivelser. Meget serviceorienteret ejer samt medarbejdere. Alt var superb inklusiv morgenmaden. Fantastisk pris får meget for pengene.