Hicimos la reserva telefónicamente porque no hay manera de poder hacerla vía web y estuvimos alojados 3 matrimonios el pasado fin de semana. Al llegar los primeros, fuimos recibidos por los propietarios del Hotel y nos solicitaron los DNI de todos los ocupantes de la habitación, en nuestro caso dos adultos y dos niñas de 7 y 5 años. Les dijimos que las niñas no tenían DNI porque no estaban obligadas e inmediatamente de muy malos modos nos indicaron que o llevábamos el libro de familia o no nos daban alojamiento. Le dije que mi marido seguro que lo llevaba escaneado, pero que me sorprendía que solicitaran el libro de familia porque JAMAS nos han solicitado el documento en ningún sitio. La señora empezó a increparme de que no tenia por qué creerse que esas niñas eran mis hijas, que podían ser robadas, que ocurrían muchas cosas y que era lo que debían de hacer. Seguidamente le increpa al marido para llamar a la Guardia Civil, increíble pero cierto... Ojalá les hubiese llamado, porque nos pareció tan fuera de lugar, de tan malas maneras, gritos innecesarios y malos modos, que de verdad, habría agredecido que hubiesen llegado y asegurarnos que estos señores tuviesen todo en regla... La señora, viendo que se había sobrepasado, nos pidió varias veces disculpas, cosa que a mi después del espectáculo delante de mis hijas, me sobroba. Después del recibimiento, evidentemente no queríamos que al día siguiente entrasen a nuestra habitación para hacer las camas y dejamos en la puerta la indicación de no hacer la habitación y no pasar. Sorpresa.... llegamos por la tarde y nos habían hecho la habitación. En definitiva, no volveré a este lugar, os lo puedo asegurar y espero que todo el que vaya a Cañamero se aloje en otras casas rurales de la zona, antes de este lugar de gente tan impresentable que no sabe estar cara al publico.
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